Yo tenía un sueño de España… pero ese sueño murió hace tiempo. El que me acunará esta noche, será mejor. Mi guía en los Años Oscuros. Y vivirá por siempre jamás. Ej12Ms

16 ene 2014

En marco de plata


Mariano está tranquilo. Ya tiene lo que quería, lo que buscaba... un tesoro... un preciado presente, ahí, sobre la mesa del despacho...

... del despacho que hoy ocupa: el de la Presidencia del Gobierno del Reino de España, la Nación más antigua de Europa... que no "Uropa", madriguera de ratas y demás burócratas afines al trinque, el intervencionismo, la búsqueda del "otro Mundo es Posible" y demás defecaciones de esa enorme araña negra... hijos de la Viuda... que, desde hace demasiado tiempo, vienen mangoneando por este continente antaño mitológico y sabio, de viejo.

Él, que se presentó a las Elecciones Generales allá por el 2004 después del "dedazo" de aquel Presidente al que, como infectado de tifus, jamás se atrevió a nombrar, no fueran, los perros de paja de la oposición, a endiñarle a su excelencia barbuda los pecados del tipo del bigote. ¿Yo? ¿A ese? No, no... ni idea. ¿Quién es?... Y así, como un San Pedro de rebajas, tres veces fue negando la evidencia, técnica todavía hoy empleada. Tres quiebros fueron suficientes aunque, de haber sido necesario, incluso hoy seguiría haciéndose el loco ante el recuerdo de aquel compadreo en la boda de la hija del Jefe, o esos puros habanos degustados en el despacho de La Moncloa, entre risas por lo bien que marchaba el Reino... en plena época de vacas gordas, donde las rebajas de las antiguas joyas industriales de la corona... vía stock options y OPA's hostiles de cara a la galería... reportaban pingues beneficios a sus majestades pseudo-liberales.

Como el apóstol, ocho años pasó crucificado boca abajo, pendoneando por los páramos de la tundra de la oposición. Ocho años... y el país, España, directo al precipicio, sumidero histórico, degradación agigantada entre cejas puntiagudas, orgasmos democráticos y una conjunción planetaria que, hoy, se nos antoja tan distante... tan lejana, aquella época zapateril... tan confusas, las palabras de Mariano, el Iluminado... sus promesas de mágicas noche de verano y mariposas en las tripas...

Algunas mañanas, al despertar y abrir las ventanas de la camareta en la que descanso, el soplo de aire fresco del amanecer me descoloca, haciéndome creer que todo ha sido un sueño, una mala pesadilla... pero no, al instante vuelve a hervir la sangre y el ímpetu se atrofia, cansado a pesar de las ocho horas de rigor. Aparece la radio, y la voz matutina repasa qué fue de nosotros, de nuestras ilusiones, los anhelos que, como novios primerizos, nos creímos aquel atardecer bajo el abrazo de la Luna lunera... ¿Dónde murieron las ilusiones, Monos? ¿Cómo pasaron los años, soldados?

Se fueron, serpenteando, entre los dedos de las manos.

Pero el Presidente está contento, sentado en su poltrona de capitán canalla. Orgulloso, se mesa la barba, satisfecho por el regalo, el presente, premio a toda una carrera dedicada a satisfacer su propio ego, mal intrínseco al cargo que ocupa. El sablazo impositivo se olvidará con el tiempo, al igual que la cesión cobarde a la ETA y sus cachorros fieles. Un año, dos... a lo sumo, tres... y los españoles, felices por contar en su haber con la Liga de las Estrellas, sustituirán, por cada gol del equipo favorito, a un asesinado por España.

- ¿Y la idea de Nación, excelentísimo Mariano? ¿Cómo la eliminaremos de las mentes de la plebe?

- Tranquilo, Ministro, tranquilo. Escuche, escuche, verá... Los españolitos no quieren ni oír hablar de perder, y con la próxima derrota en el Mundial, las banderas serán quemadas, no vayan los vecinos, ante tal chivato ideológico de tela rojigualda, a pensarse que uno está con los fracasados. ¡Qué va! El fracaso, en España... tierra de envidias en grado sumo... está muy mal visto. Sólo hará falta que el Marqués del Bosque pague su título honorífico con un par de cambios posicionales... y, ¡voilá!... ¡ya nadie querrá saber nada de España! Todo estudiado, Ministro. Sírvase otro coñac, sírvase.

Así, de esta guisa, pasará la legislatura de el Iluminado de La Moncloa, entre humo, alcohol y imágenes catódicas en TV de plasma full equip, para nada perjudicial a la vista.

Y él se irá, y quedarán los españolitos rezando a su Dios, aquel que sepa, o a Mamá Estado, siempre presta a repartir la migaja del menú degustación que la Casta se zampó en el tres estrellas Michelín de turno. Migajas a precio de oro, no se crea, que nada es gratis en esta vida, y la misericordia del Estado, mucho menos. Se cobra cara, la ayuda. A precio de oro.

Su alma terrenal... y la mitad de la divina.

Clic. Clic. Olor a gasolina de Zippo rápidamente sustituida por el aroma dulzón del habano regalado por el Coma-Andante Fidel. Zapatos sobre la mesa de caoba amazónica, corbata aflojada, fina sonrisa en los labios hinchados por el ácido úrico de las ostras que se endosó entre pecho y espalda durante el almuerzo... Sus ojos se posan en ella. Espléndida. Magnífica ahí, en su predilecto espacio sobre la mesa, con su marco de plata de ley, siempre limpia, testimonio de su éxito como... como... ¿como estadista? ¡Bua! Quizá sí, quizá no... ¡A quién le importa eso! Él la tiene. Al fin la consiguió, tesoro envidiado por todos los sabiondos de este lado de Occidente... objeto de deseo de los pequeños mocosos que, de tanto en tanto, se acercan por casa y que, boquiabiertos, atienden a las batallitas de ese genio... ese héroe de espadas... Atrida de los parias... dominador del rayo... Zeus recolector de nubes...

La foto. Su foto con Obama, tesoro divino.

Sueño  realizado... sobre la mesa... los dos sonrientes... satisfechos... genio y figura...


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Lo importante es la foto. José Luis Rodríguez Zapatero, el presidente Felón.

8 comentarios:

Herejes sin Fronteras dijo...

Y ahora tiene su foto con Obama que es lo más importante.
Es lo que sueña todo político estúpido español.
Como si a los españoles nos importara lo que tiene que decir el ZetaParo gringo.
En fin ¡Vaya Tropa!

Maribeluca dijo...

Qué quieres, a nadie le amarga un dulce y esa foto me parece infinitamente mejor y más normal que la de las góticas mamarrachas.

Un espaldarazo de la primera potencia nunca viene mal.

Y el de Porres además de tontilón es un agarrao cutre que le ha regalado al anfitrión unas chocolatinas...

José Luis de Valero dijo...

En un pasaje de tu post te preguntas:
"¿Dónde murieron las ilusiones, Monos? ¿Cómo pasaron los años, soldados?"....Yo creo tener una respuesta válida, estimado Herep

Los deseos, las ilusiones y las esperanzas de todo el Pueblo Español, se han hecho añicos y sus fragmentos se han lanzado por la borda. Nos han vendido una democracia que ha quedado pulverizada a golpe de corrupción política y financiera, y de intentos separatistas consentidos precisamente por quienes deberían velar por la integridad territorial de España y por la fiel distribución de los caudales públicos.....

Este es un fragmento de mi próximo post, y no creo estar desencaminado.

Un abrazo, querido Herep.

CARLOS CC dijo...

Es un placer comunicarte que tu blog ha sido seleccionado finalista del Premio Libertad de Expresión en la Red.
Suerte.
Un abrazo.
http://rebuznometro.blogspot.com/2014/01/premio-rebuznometro-la-libertad-de_18.html

Herep dijo...

Lo dicho, Chafa: ya está la foto lista para decorar el despacho de Mariano por el resto de sus días.
Creo que la lleva hasta de pantalla del Ipad.

Un saludo.

Herep dijo...

Puestos a elegir, prefiero esta que la de las góticas... pero lo que critico es que se de importancia a una idiotez como la de la foto, y más hoy en día cuando, con los móviles inteligentes, una foto es menos que nada.
La importancia dada es, bajo mi punto de vista, un acto de pleitesía cateto, pero... la política, también en el ámbito mundial, ha quedado relegada a eso: marketing.
En cuanto al regalo del Porres Boy... pfff... suerte si acierta dónde tiene la mano derecha.

Un saludo, Maribeluca.

Herep dijo...

El muerto llevaba mucho tiempo en descomposición, José Luis, pero como el dinero corría y podía ofrecerse "pan y circo"... pues nadie se quejaba. Ande yo caliente...
Pero cuando se acaba el "pan" y el circo pasa a ser teatro del malo, empiezan los problemas y los descosidos.
Al final, en estos casi cuarenta años de democracia, se ha demostrado que el bien común no está defendido por nadie. Ni los unos, ni los otros. Nadie.

Veremos si la masa aprende, aunque pocas esperanzas albergo.

Un saludo.

Herep dijo...

Gracias por avisar, Carlos.

Un saludo.