Yo tenía un sueño de España… pero ese sueño murió hace tiempo. El que me acunará esta noche, será mejor. Mi guía en los Años Oscuros. Y vivirá por siempre jamás. Ej12Ms

15 jul 2011

Ofrenda floral


Increíble… apoteósico… ¡Soy el más grande!

El candidato, de pie junto al atril, saluda con el brazo izquierdo en alto… realizando el signo de la victoria con sus dedos, mecido por la lluvia de aplausos y vítores que ha estallado tras su discurso… ¡Guapo! ¡Guapo!... con un auditorio a rebosar… y en aquella plaza de toros cabe gente, de veras que cabe. A simple vista, veinte o treinta mil personas… todas extasiadas, borrachas de entusiasmo… en clímax.

Surcando la espalda del candidato, una gota de sudor desciende electrizando la piel a su paso. No es calor o nervios la causa de tan extraña sudoración en él, pues el candidato, inmutable, nunca se pone nervioso… nunca duda… sigue su esquemático y perfectamente elaborado plan. Son los focos… los cientos de focos que alumbran hacia su posición lo que ha desestabilizado su control. No está acostumbrado a estar en primera línea… bajo la atenta mirada de la parroquia. Él se desenvuelve mejor en la sombra, sigiloso en los callejones… donde ha permanecido durante toda su carrera.

¡Guapo! ¡Presidente!

¿Has visto cómo me vitorean? ¡Los tengo en el bote! El candidato, siempre con esa sonrisa suya… mitad timidez, mitad soberbia, se siente bien… orgulloso… como un artista de Hollywood la noche de un estreno… rodeado por los suyos... incondicionales.

Con estas bases, no se puede perder. Me siguen, fielmente… hasta el fin del mundo, si fuera preciso. Y hasta el final de los tiempos le seguirían, pues el candidato, es de los suyos… de su bando en esta lucha sin cuartel. ¡Me siento tan agradecido!

- Gracias, gracias… amigos… muchas gracias.

Tan agradecido. Y los aplausos siguen y siguen, ahora con el auditorio puesto en pie. No hay reproches a sus actos pasados… ninguno. Y no siempre las cosas han sido fáciles. Ha sido por el bien de todos… En una ocasión, el candidato, que poco antes ocupaba cargos de máxima responsabilidad, traicionó a quienes ahora tanto aplauden, vendiéndoles a quienes querían acabar con todo… El fin justificó todo el tejemaneje que tuvimos que hacer… Lo sabéis, ¿verdad? Pero allí nadie quiere saber nada.

El candidato, subidas a su chepa, lleva multitud de cadáveres. Compañeros, subordinados, amigos… ¿Traiciones? ¡Qué va! ¿No ves cómo aplauden? Eran pequeños peajes a pagar… tan sólo eso. ¡Ellos qué sabrán! A fuerza de resolver todo tipo de situaciones ha llegado a alcanzar la posición que hoy ocupa: candidato a la Presidencia del Gobierno… y, desde el primer momento, supo que no iba a ser un camino fácil… pero para el candidato, nada es imposible.

Lo veo todo. Los oigo todo. Lo sé todo. Había controlado y conducido a su gusto todos los resortes que el poder le daba… apartando a los que pudieran suponer un obstáculo… Me merezco esto. Me lo merezco de veras. Ahora son felices... ya no hay ni dogmas ni tabús… ¡Todo es posible! Maquinó, nuestro candidato, mientras ninguneaba a los discrepantes… borrando la información de los telediarios… todo según su plan… ¡Fueron males necesarios! ¿Para qué preocupar al pueblo?... comprando voluntades y pensamientos…

¡Presidente! ¡Queremos un hijo tuyo!

Las fans están como locas. El candidato, a lo lejos, distingue tres cámaras de televisión con la lucecilla roja encendida… emitiendo en directo… a él. Su cara. Su patrón. ¿Cómo os gustan las migajas del pastel, eh, pillines? Son las únicas. No hay más con pase de periodista. No se lo merecen. Tampoco estaría asegurado su trabajo. ¡Tensión!... huelo tensión.

Y el candidato, frotándose las manos, sonríe.

Esto… ¡Allí!... ¿Y ese chaval?... ¿Qué quiere?... Un joven se adelanta desde la primera fila. Lleva unos segundos sin aplaudir… pensativo, nervioso… mirando de reojo de lado a lado… camina… se acerca al candidato… encorvado… Los guardias lo han visto y uno habla por el micrófono de su solapa… parece que… sí... Las dos señoras que estaban al lado del muchacho también han dejado de aplaudir y sus caras, acompañadas por unos ojos exorbitados, denotan sorpresa… incredulidad… ¡Ese! ¡Ese!...

Los guardias se abalanzan sobre el chico… con intención de placarlo… todo muy deprisa… pero el chaval, con tres brincos, se ha plantado sobre el escenario, a tres metros del candidato… que está paralizado… no comprende… ¿Qué pasa? ¿Qué quieres?...

¡Detenedle!...

… pero ya es tarde… han sido cinco segundos escasos… impensables dentro de esta orgía de sumisión e idolatría… aprovechados por el joven para, justo antes de ser embestido por dos morlacos uniformados, estampar una tarta de blanco merengue en la cara del candidato… con un sonido sordo… como a hueco.

Uno arrastrado… las mujeres de la primera fila, aterrorizadas… las televisiones, pasando a publicidad… el candidato, con la cara llena de blanco merengue desparramándose sobre su traje negro cosido a medida para la ocasión… permanece paralizado por la impresión, en pie, solitario sobre el pedestal… con la mente desconectada… anulado… derrotado por una tarta de suave merengue...

… mientras, como todo ha sucedido tan deprisa, aún siguen retumbando, en la plaza de toros, los aplausos.

8 comentarios:

CAPITAN TRUENO dijo...

La tarta, ¿podría estar envenenada?, pregunto ilusionado.

Unknown dijo...

Para todo candidato, hay una bala con su nombre escrito... o una tarta!!!

Genial

Herep dijo...

Podría, podría... Capitán, aunque no creo que hiciera falta para derrumbar este "gigantón con pies de barro".... perdón, de faisán.

Un saludo.

Herep dijo...

Jack,

En Chirigota Española, s.l., no hay ni balas ni tartas. En otros países, quizá... pero aquí... nada.
Como mucho, se sube alguien al escenario a enfundarte un pañuelo palestino.

Saludos, pirata.

Tío Chinto de Couzadoiro dijo...

El candidato está muy bien situado -probablemente, ocupa una posición nada envidiable- para iniciar la ruta del calvario que lo lleve a Jerez.
Un saludo cordial.

Herep dijo...

Buenas Tío Chinto,

A ver si culmina la escapada y le vemos entrar con los brazos en alto.

Saludos y buen fin de semana.

candela dijo...

jajaja!!!

Muy bueno. Pero eso de "queremos un hijo tuyo", que peligro..

Con uno vale, y deberían haber tirado ya el molde.

Un dardito con curare, le tiraba yo a ese..

Herep dijo...

Lo podrían poner como mono de feria... en una atracción de esas en que se está sentado sobre un barreño de agua, a la espera del tiro certero que lo sumerja de sopetón.

Saludos, Candela.