Yo tenía un sueño de España… pero ese sueño murió hace tiempo. El que me acunará esta noche, será mejor. Mi guía en los Años Oscuros. Y vivirá por siempre jamás. Ej12Ms

6 sept 2012

Que nadie duerma

 


" ... Ríe del dolor que te envenena el corazón... "


Luciano Pavarotti. 12 Octubre 1935 - 6 Septiembre 2007


12 comentarios:

Unknown dijo...

Nadie duerme mientras no encontremos quien vele los sueños de los hombres valerosos.

Un saludazo.

Anónimo dijo...

Velemos armas, como los antiguos.
Saluditos.

Tío Chinto de Couzadoiro dijo...

Es difícil no emocionarse con esta música que llega al corazón, y con esta letra terrible del hombre que, a pesar de su tragedia interna, tiene que salir a hacer reír.
Sí, amigo Herep, tenemos que hacer reír a otras gentes, mientras llevamos el dolor de España en el alma.
¡Un cordial abrazo!

Wittmann dijo...

Herep.

Si no podemos soñar, no sé donde podremos encontrar un país mejor o, en todo caso, sin soñar no podríamos abstraernos de los derroteros a los que están abocando a nuestra nación. Así que buenas noches.

Un saludo.

Lin Fernández dijo...

Que belleza tragica encierra la portentosa voz de Pavarotti,Cuando se le oye tu mente vuela hacia el Olimpo,un abrazo,

candela dijo...

Una de mis favoritas, buena elección Herep

Herep dijo...

Cada día se hace más difícil dormir, CS.
Pronto los sueños caerán en el olvido más profundo y enloquecedor.

Un abrazo para vos.

Herep dijo...

Firme el ademán, Zorrete.

Un abrazo.

Herep dijo...

Luciano es uno de los dioses del Olimpo, Tío Chinto. Esta interpretación, para mí, es la mejor que he escuchado del Pagliacci de Leoncavallo.
Es difícil que no se te erice el vello con esta aria... y su significado, amigo mío, se hace presente cada día, al abrir los ojos.
Quizá, como le sucede a Canio, el problema es que él tiene los ojos bien abiertos.

Un saludo, artista.

Herep dijo...

¿Te has fijado, Wittmann?
Aquello que es lógico... el trabajo, el amor a aquello que merece ese don, la libertad y el coraje para afrontar el porvenir... todo eso, lógico y natural, se nos ha convertido en mero sueño... en deseo...
¿Dónde olvidamos que eso es real, para creer que se trataba de una utopía onírica?

Esta noche, si no puedo dormir, intentaré darle vueltas al asunto, a por qué derroteros divaga mi mente.

Un abrazo.

Herep dijo...

Tenía un poderoso don, Agustín.
Una voz digna de ser escuchada entre un mar de lenguas viperinas.
Cuando murió me embriago la tristeza.

Y, amigo mío, la tristeza deja muescas más profundas en mis huesos.

Te envío un fuerte abrazo.

Herep dijo...

Gracias, Candela.

Un abrazo.