Estos días de Agosto, las playas de la Costa Dorada vuelven
a estar plagadas de turistas, foráneos o nacionales, tostándose mientras pacen
tumbados a la bartola, saqueando las reservas cerveceras de los chiringuitos o luciendo palmito embutidos en minúsculos bañadores, los varones, y mayúsculos bikinis… para mi gusto… las féminas.
Como novedad para este año, en algunas playas de la zona se
han instalado pequeños gimnasios al aire libre, donde esculturales figuras
compiten en el levantamiento de hierro a pleno Sol, mostrando a la parroquia
dominguera qué grandes son los músculos, qué tensos los torsos o cuánto líquido
se debe beber para no caer, por obra y gracia de la lipotimia, redondos al
suelo.
Cosas normales… y veredes… para los Hijos del Verano.
Pero entre la marabunta de turistas que expían sus culpas y
sus tensiones musculares mediante baños más bien templados, tal y como sucedería en cualquier piscina donde fuera costumbre establecida el
miccionar en el agua, pocos conocen el enorme peligro que se esconde en las profundidades del Mare Nostrum. En las
guías turísticas nada se dice, y los telediarios, cónicas de sucesos veraniegos
más propias de “El Caso”, pocos redactores jefe osan mencionar el tema, no
fuera a malhumorarse la audiencia si, por un casual, no quedara desvelado el
ganador del concurso de tortilla de patatas del barrio o el campeón del trial
de ingesta de mejillones al vapor.
Pocos ven esa negra sombra, acechante, bajo las aguas
cristalinas. Pocos notan la presencia del submarino atómico autóctono mientras
éste les roza los pies. Pocos, crédulos ante la mera sospecha del leviatán del
Lago Ness, el chupa-cabra latino o las brujas de Salem, dan por ciertos los
rumores que afirman la existencia del monstruo español.
Pocos lo han visto… aunque algunos lo intuyen… en las
profundidades, siempre al acecho, en guardia ante la presa fácil y el alimento
seguro.
Pero existe. Responde al nombre de Kraken.
El Kraken español.
El calamar gigante que, con sus infinitos y enormes
tentáculos, todo lo abarca, todo lo absorbe, todo lo engulle convirtiendo su
ingesta en negra y tenebrosa tinta… negro color con el que embadurna de
tinieblas todo futuro nacido en esta tierra anteriormente conocida como España.
Orgullosa España.
Algunos, ateos dirán que eso son viejas leyendas contadas
por viejas tatas para aterrorizar a los nietos rebeldes… o se escudarán
alegando que no es lógico creer aquello que no se ha visto… Son vulgares,
Monos. Son cobardes, temerosos de lo desconocido. Gentes que, cuando nadan, no
miran hacia abajo para no sentir el escalofrío que provoca la amenaza de la
profundidad… el vacío acuoso bajo los pies… Personas que, al no creer en nada,
creen en cualquier cosa.
Pero nosotros lo hemos visto.
Cada día.
Hemos contemplado cómo sus tentáculos se aferran a los pilares del templo. Cómo nuestras riquezas, bienes y valores
han sido devoradas por esa quijada negra que el monstruo esconde bajo su
ovalada cabeza… cómo, a su paso, no quedaba más que tinta.
Uno de ellos, de cien varas de longitud, se pegó, un día
allá por la mitad de la década de los setenta, a la viga de la Justicia,
succionando todo el tuétano que en ella circulaba, hasta dejarla seca y
agrietada… víctima de una horda de carcoma. Los jueces válidos, de excelente
sabor, fueron engullidos para, inmediatamente, sustituir sus puestos por otros
más acorde al gusto del inmenso parásito. El tentáculo devoró a Gómez de Liaño
para dejarnos a Gómez Bermúdez… a Dívar… a Garzón…
Por las mismas fechas, otro tentáculo se aferró al pilar de
la Educación que, no pudiendo soportar la presión, cayó al nivel subterráneo en
el que la tenemos ahora. De un seco y certero golpe, la ciencia del
conocimiento quedó hecha añicos, siendo sustituida por la ciencia del adoctrinamiento,
donde todo lo adquirido en el Pasado quedaba relegado a “fascista”… y lo que se
vislumbraba ante los ojos, “progreso”.
El Kraken, monstruo dotado de diabólica inteligencia, arrasó
el verde campo de la ciencia patria para sembrarlo todo con su simiente de
odio, rencor y sectarismo criminal y bastardo. Hoy, la flora que crece a su
alrededor… la flora española… no es más que la colonia de bichejos excretados
por el Monstruo. Los profesores, las cátedras, los máster… las cien
Universidades, las mil becas, los tropecientos mil subsidiados por el
Ministerio de Educación del Kraken… Nada. Sólo son súbditos de un leviatán que,
con gesto soberbio, sonríe mientras sus pulgas le limpian la húmeda y pringosa
piel.
Por doquier resurgen los tentáculos del monstruo más allá de
las 20.000 leguas de viaje submarino. Nada escapa a su húmedo y pegajoso
abrazo.
Nada.
España toda, mientras los reos disfrutan de sus vacaciones…
merecidas, o regaladas… es víctima de la voracidad del Kraken. La
Administración, la Sanidad, la Economía, la Hacienda… A todas partes ha llegado
el abrazo mortal del ser de las profundidades.
Hizo bien su trabajo, en época de la Transición, cuando un
nuevo y flamante barco velero se hacía a la Mar, cargadas sus bodegas de
ilusiones y buenas intenciones, tras años de costosas reparaciones en los
astilleros de la Historia. La nueva España se botaba de nuevo. Pero los
marinos, a las órdenes de un Mando traicionero y desleal, erraron en la
dirección del viento, convirtiendo el barco en presa fácil para el Kraken.
Con el tiempo, descubriríamos… quienes creemos en el Kraken…
que aquellos mandos que daban órdenes desde el puente, recibidos días atrás en
honor de multitudes gracias a unas falsas buenas intenciones y unos falsos currículos
de marinería, no eran más que miserables traidores vendidos por cuatro monedas
de plata.
Los primos del Monstruo.
Y así estamos. Ahora mismo, tumbado sobre mi toalla,
contemplando el panorama estival de este año 2012… año de Apocalipsis por
excelencia… mientras cientos de osados se bañan en las aguas propiedad del
Kraken… ajenos a la total corrupción que les rodea… que les abraza como haría
cualquier madre con su retoño. Ajenos al abrazo de los tentáculos, llámense éstos
inspecciones de ITV, actos notariales, afinidades judiciales y fiscales… comisiones del 3 por ciento... “qué
guapa viene usted, señora Concejala”… “no puedo prestarte el libro de la
biblioteca porque no tienes nivel C”… “la orquesta de las fiestas del barrio le
costará mil votos marcados a la asociación de vecinos”… “el servicio de
vigilancia está operativo, Presidente”…
… todo está bajo los tentáculos del Kraken, Monos. Todo.
Pedir un crédito al banco, pagar una receta en una farmacia con licencia
administrativa, ganar una plaza en cualquiera de los mil cuerpos de policía, el "obsequio" de una beca o una plaza en la residencia de la tercera edad…
El Kraken, sus tentáculos y las mil bacterias que los
acompañan, han hecho ventosa. Están bien aferrados a esta España nuestra que,
día a día, ve cómo su legado va transformándose en negra tinta… negra tinta
diluida por el ancho Mar.
Nosotros lo sabemos. Lo hemos visto… hoy de nuevo, tumbados en la playa… y aquí,
ahora, deshidratándonos bajo este Sol tan nuestro, seguimos sin mojarnos, tan
siquiera, un pie.
14 comentarios:
Yo también veo, a diario, el calamar gigante Kraken, amigo Herep. No en el mar, ya que resido en Madrid. Sus tentáculos, amenazadores, asoman sobre la sierra de Guadarrama y lo arrasan todo. Uno de sus tentáculos más dañinos hace estragos en Andalucía. Se llama Gordillo, y opera en la zona de Écija.
Un cordial abrazo.
El Kraken cada día crece más. Sus tentáculos cruzan el estrecho y suben por el Atlántico hasta el golfo de Vizcaya; y como todo bicho viviente que crece necesita más nutrición, por lo que va estrechando cada vez más el abrazo, y cuando nos demos cuenta, estaremos tan comprimidos que Madrid se convertirá en el pico más alto de España.
Saludos
La verdad es que contrastan esas imágenes veraniegas con el sombrio panorama. Kraken, me temo, solo ha empezado a hacerse notar. Cuando todos se percaten de su presencia será ya demasiado tarde.
Pues espera al mes de Octubre y el Kraken se multiplicara por mil.Eso esta a la vuelta de la esquina,un saludo,
¡Muy Buena Entrada,-Como Siempre-, Hermano Herep!
El KRAKEN, No Sólo Existe, Sino Que También GOZA DE EXCELENTE SALUD...
Antaño,-LOVECRAFT Dixit, El Dios CThulu y Sus CALAMARCILLOS FILIALES, Poblaban Los FONDOS MARINOS MÁS PROFUNDOS...
Sólo DELFINES, BALLENAS Y TIBURONES, Protegían a La Raza Humana de Los PELIGROS DE TALES BICHOS MALIGNOS...
Ahora, Que La PESCA INDISCRIMINADA DE ESPECIES MARINAS, Nos Está Dejando SIN DEFENSORES NATURALES, Es NORMAL, QUE, LOS MONSTRUOS ASCIENDAN DE NIVEL Y SeVayan Haciendo Con Las Cotas de PODER Que "SE LES DEJA CONQUISTAR", Con La Complicidad de SUS "SEGUIDORES Y SACERDOTES"...
¡Como Los DIOSES ARQUETÍPICOS, NO NOS ECHEN UNA MANO, EN EL COMBATE FINAL, QUE VEO PRÓXIMO ¡ESTAREMOS AVIADOS HEREP!
EL KRAKEN, En HUESTES CERRADAS Y PERFECTAMENTE ORGANIZADAS, ATACARÁ SIN PIEDAD LOS RESTOS DEL "ESTADO DE BIENESTAR", QUE AÚN "NO HAN PRIVATIZADO" Los CANALLAS A SU SERVICIO.
Un Abrazo, GENIO.
Un Brindis Con Algo FUERTE.
y
¡¡RIAU RIAU!!
"No le busques los ocho pies al kraken" y procura desconectar un pelín por unos días...total, parece que nos va a dar igual, así que ¿cómo era aquello? "relájate y disfruta"...
Un abrazo, majo.
Lo que se nos viene encima no es pequño, así que yo estoy con Maribeluca, disfruta lo que puedas que ésto nos lo arregla Europa, pues ya se ve que los de abajo, nada de nada.
Un saludazo.
Son todo tentáculos del mismo Monstruo, Tío Chinto.
Su podredumbre todo lo abarca, de Norte a Sur y de Este a Oeste.
Y la mayoría de los ciudadanos de España lo abrazan con pasión.
Un saludo, y mantente lejos de él.
Si, Xad Mar. El Kraken cada día es más palpable y monstruoso. No deja que nada escape a su control, que lo es todo. El Sistema está corrupto hasta la médula y raro es el lugar en el que no se percibe el hedor de sus viscosos tentáculos.
Eso sí... la ciudadanía contenta.
Todos quieren posarse sobre él y disfrutar de las migajas que no es capaz de engullir.
Un abrazo, astur.
Ya es demasiado tarde, Candela.
Hace algunos años nos escandalizábamos cuando alguien nos hablaba de las "cloacas del Estado".
Hoy todo es cloaca.
Nada se salva en este barco a la deriva en el que estamos hospedados.
Un abrazo.
En Octubre todo será kraken, Agustin.
Y, a poco que os despisteis, los tentáculos llegarán hasta Nuev Zelanda.
Atento.
Un abrazo.
La pesca de arrastre nunca fue justa, Old. Lo arrastra todo, llevándose aquello que, en el futuro, pudiera ser bueno.
Eso ha pasado con la pesca de arrastre de nuestra democracia. No ha dejado nada para el futuro, pudriéndose ella misma de raíz.
Ya sabían bien lo que hacían, amigo.
Pero atentos... en el Cuartel General tenemos buenos hijos de Galicia, amen de tener muy buenos amigos por esas tierras.
Amigos que, un buen día, me enseñaron a cocinar el mejor pulpo de la Costa Dorada.
Que no se fíe el kraken, a ver si voy a echarlo a la olla en un despiste.
Un abrazo, camarada. Si tengo la enorme suerte de echarle mano al octópodo, tendrás invitación al festín. Y brindaremos con Ribeiro y Albariño.
¡Riau!¡Riau!
Maribeluca,
Tengo la suerte de vivir a cincuenta metros de la playa. Mi vida, quiera o no, es un relax constante,a pesar del trabajo.
A las siete, amiga mía, la playa es el paraíso.
Un abrazo. Seguiré tu consejo.
Yo no confiaría mucho en Europa, CS.
Ellos se arreglarán lo suyo, y adiós España.
Siempre fue tierra de traiciones, la europea.
De todas formas, os haré caso y me tomaré unos días de (más) relax.
Un abrazo, Pedro, y que tengas un buen verano, campeón.
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