Yo tenía un sueño de España… pero ese sueño murió hace tiempo. El que me acunará esta noche, será mejor. Mi guía en los Años Oscuros. Y vivirá por siempre jamás. Ej12Ms

19 sept 2025

Mascaradas



 ... entras...
... y es una sensación extraña... todo en calma, en silencio, apenas luz ilumina la Sala X, la bulliciosa cantina de los años mozos... el Cuartel General por entero... El piso cruje, la madera de las columnas envejecida, desconchada pintura por aquí y por allá, y frágiles telas de araña decorando esquinas que esconden espíritus errantes...
Todo vacío, sin soldados, primates, ni uno ni doce ni trece ni nadie.
Pero hoy hay función.
Y ahí salgo, desde bastidores, a contar mis chistes nuevos a este público viejo.
Y apenas en el escenario, aposentado en el taburete de las glorias pasadas, liado un cigarrillo, miro hacia los focos, deslumbrado, sabiendo no encontrar ni un triste cruce de miradas, pero sonriendo, a punto tras carraspear cazalla... todo ensayado... tres, dos, uno...
... para empezar con el...
... ¡Pero qué publico más tonto tengo!...
Porque público imbécil es el que aguanta ahí detrás, mudo, ojiplático, retorciéndose por mil picores y escozores sin científica causa climática. Sufren las infamias representadas en el gran teatro del mundo calderoniano en el que se ha convertido, si lo dejó de ser alguna vez, esta vieja piel de toro que fue España.
Sufren entre risas y carcajadas y golpes en el pecho de comunista superioridad moral.
Qué idiotas asisten al saqueo socializante del "otro mundo es posible" que asola de norte a sur, de este a oeste, de flotilla hasta asamblea... Entre Ingreso Mínimo Vital, deudas condonadas, politología de pelo en axila y demás menstruaciones autonómicas, aplauden cuales títeres de pandemia imaginándose agraciados con alguna prebenda, un apretón de manos en el mitin del domingo a mediodía, si hay suerte un vasito de plástico de vermú, una foto firmada del puto de dos metros.
En el palco, público idiotizado cuelga el esmoquin por mejores galas heredadas del abuelo del batallón Líster. Obsérvalo, presto al asalto del Cuartel de Inchaurrondo convertido hoy en badulaque pakistaní. Bajo su ímpetu, el cerro del Hotel Mena Palace cinco estrellas en la escala del Estado del Bienestar... pensión completa incluido albornoz de la benemérita, virgen blanca sumisa y machetazo gratuito... no ha de rendirse.
¡Atronador aplauso! ¡Vítores y gente en pie! ... ¡Open Arms!¡Open Arms!...
(Oh, Dios... pero qué público más tonto tengo)
Pausa, trago saliva, algo frío gaznate adentro, calada, el guión dicta sección de putas, drogas, género multicultural de piernas abiertas y ganado salvaje en el metro. Éxito asegurado. Al memo le gusta deshumanizar al paria, dispar de lejos o degollar en el autobús, gritarle alienado... fascista... ¡Oh, qué de antifas hierven en el teatro! ¡Qué no habría sido de la Historia del Universo de haber estado vosotros ahí, en el momento oportuno! Cuántas judías podrían haber sido violadas, cuantos bebés triturados in utero, cada ciclista equivaldrá un árbol en el bosque de la biodiversidad y perros y gatos y peces gozarán de sanidad y educación y VPO y pensión a perpetuidad merced al Líder Supremo de la Sauna Socialista Tremendamente Enamorado.
Rompe la armónica comunión teatral la mujer de primera fila entre exhortaciones democráticas y maldiciones de progreso pues cree ver la imagen fantasmal del marido muerto, allá en el infierno, podrido por los gusanos patriarcales, aterrado víctima del rosado pelo Pantene Gulag... Oh, mi Charo... ayer de mantilla y cofradía, hoy liberada de género y de limpieza de sangre. Llora. Llora cual colegiala, haciendo así con las dos manos juntas, como una forma de coño.
Cristiana vieja, su pellejo no sufre de inflación.
¡Guapo!, me grita ciega de ideología, analfabeta, mientras pongo rumbo directo al camerino.
Ellos aguardan... esperan un bis que no ha de suceder. Pasan segundos como años, minutos son décadas, y las caras no varían ante el taburete vacío. Suelte sapos y culebras y mentiras o medias verdades, han venido a gozar de los dos minutos de progreso con los que disfrazan el atroz odio e infamia de clase que supuran, hediondos.
Dos minutos. Mañana, uno será suficiente. Después, no hará falta ni alzar el telón.
Henchidos frente a la roja tela inerte, se verán atravesando las puertas del Valhalla.


15 ene 2025

El fraude climático




Si usted ve el fraude y no dice fraude, usted es un fraude.
Nassim Taleb

11 mar 2024

Dies irae, dies illa Solvet saeclum in favilla


 Hoy se cumplen veinte años del atentado terrorista de Madrid.
Veinte años...
... y la lista de preguntas sigue ahí, a la espera de respuestas.
La costumbre de la efeméride en la era de la razón líquida, sin embargo, ha restado pujanza al deseo de conocer la Verdad: no en este grupúsculo de monos venidos a menos, sino en una mancha humana que… veinte años de dudas y visto en perspectiva… quizá jamás tuvo intención de saber.
Casi doscientos muertos y varios miles de heridos son el tablado flamenco sobre el que zapatea la sociedad de progreso-multi-guay-del-paraguai que fue parida al compás de la democracia setenta-y-ochera, la traición y la cobardía supina.
A las palmas de tan alabado y afamado grupúsculo, la hez del cuarto poder… antaño fiscalizador y hoy mera comparsa a sueldo pecuniario o en especie.
2004 – 2024.
Veinte años… y la sospecha, la duda que nos ha acompañado en este viaje a lomos del globo azul por la inmensidad del vacío cósmico, hoy… ayer… siempre… lo es menos, pues se tornó más cierta… palpable… quien quiera ver, que vea.
Porque veinte años después, Chirigota Española, s.a. es más cenagosa que nunca, con un producto interior per cápita idéntico al que amenizaba las pantallas de los economistas de cabecera aquella lúgubre mañana de finales de invierno. Tiempo perdido, futuro robado, vidas hipotecadas.
Los enemigos de la Nación, al son de los aplaudidores de las ocho en punto de la tarde, se alzan como paladines de la democracia y la convivencia; el terrorismo es el garante de la paz; la morería rebanacuellos augura el futuro de las pensiones; el golpismo catalufo de Nivel-C (de catalazi) es amnistiado y, pronto, subvencionado… los patriotas anda por las redacciones de los periódicos siendo tildados de fascistas al más puro estilo komintern… las fuerzas económicas del país, vilipendiadas en nombre de los primus inter pares de Davos… los narcos y sus perros guardianes copan las listas de ídolos de la juventud mejor preparada de la historia de España… el sultán bujarra de Jovenlandia afila teléfonos pinchados perfilando venganzas con forma de islote perejil… por doquier, la risa, la chonza de la abuela haciendo tertulia sentada en compañía a las puertas de su casa en la desusada España castiza, desacomplejada y orgullosa de antaño, ha sido sustituida por la alarma y el barrote en la ventana. Las mujeres ya no besan, sino escupen. Los niños, pronto, pierden la inocencia.
Pero no lloréis ¡oh, Monos míos!, por las miserias de esta ingeniería social orwelliana.
Todos somos culpables.
Desde el momento en el que no se quemó en la pira de los muertos… desde el instante en el que no hicimos que ardiera el Régimen…  la ciénaga de desolación y muerte que vio la luz con el fogonazo de las bombas, las protestas sectarias y la mentira institucionalizada, fue lo único que, veinte años atrás, se apeó victoriosa del viaje en tren.
Desde aquel día, todo es 11-M.
… y hay que pagar la fiesta. 


19 feb 2024

27 minutos.....

 


... (y 45 años después).


31 jul 2023

Überhund



Temerario, acepto el reto del climático para contaros la historia de Paco.
Paco el largo... el imbécil... el soplapollas.... Son muchos los apodos, a elegir.
Deciros que Paco nació allende el río Ebro, frontera geográfica que separa el maná del Universo de la barbarie cavernaria. Ufano, escapó de las garras de la tierra yerma heredada para, en un giro copernicano de los acontecimientos, caer de hoz y coz en la fértil campiña de la "Dinamarca del Sur", donde Paco prosperó hasta alcanzar las mayores cotas en el estamento social que jamás pudo prever una mente tan poco dada a imaginerías de aristocrática burguesía.
De perro perdiguero, pasó a perro perdiguero pedigrí Nivel C.
Las piezas, en las mandíbulas, saben menos a sangre si se aderezan con voluntaria servidumbre.
Arrastrado sobre el estiércol de la ideología racialista, vilipendiado por el Rh caduco y acomplejado, ultrajado bajo el yugo del hecho diferencial, Paco, hoy, en su nueva condición de clase, se siente libre... más libre que allá en su lugar de nacimiento donde la Providencia había puesto coto a su evolución como ser sintiente... a su derecho vital elemental.
Aquí y ahora, más que hombre, perro de nuevo cuño movido por la voluntad de poder.
Super-perro.
En el profetizado edén, Paco el gilipollas se siente apreciado, cultivado el intelecto, sabedor de idiomas.... sí, sí.... entendido, claro, claro... apenas lo balbucea y el acento no pasaría inadvertido ni tan siquiera al más mudo de los sordos, pero eso, para Paco el simple, Paco el integrado, carece de importancia. 
Él, siervo allí, es subyugado aquí...
pero
voluntariamente
-Paco, el voluntario-
-Paco, el poderoso-
pues arma inquebrantable es el corazón voluntarioso.
El Señorito de distinguida estirpe, inaugurado un nuevo milenio en la tierra prometida regada por el don olímpico, prosado en derechos y libertades y progresos varios en las más sabias universidades de la liga, así lo aprecia y agradece. Ya sea mediante la palmadita en el hombro, el coscorrón de pan a untar con rancio tomate mohoso o el segundo de silencio ante el ataúd de la hija muerta víctima del tifus. Gran honor para la familia de Paco el mentecato, sírvase vino del sindicato en el purgatorio, las mejores sillas para tan distinguidas posaderas.... ¡De rodillas al suelo, hijo, zoquete, no vayan a ensuciarse de barro los mocasines del misericordioso Hereu, padre de la patria y de todo lo que abarca la vista bajo el imperio del Sol
Son, estas, Historias de claudicación. 
La de Paco y la interminable lista de próceres en la servidumbre que, un buen día, fugándose de una esclavitud casual, optaron conscientemente por abrazar nuevas cadenas de mayor grosor. Pululan por las calles siempre dispuestos a un "bon día" acharnegado y ridículo mientras sorben fino manzanilla a escondidas en la barra del bar antes de acudir al comercio de proximidad a comprar verduras, frutas... esas perdices... que, encajadas entre fauces Nivel C de voluntaria servidumbre, son menos nauseabundas. Camadas de Pacos de mirada acomplejada donde perderte como náufrago en el océano, y ni en esta vida ni en mil que hubiere, has de encontrar asidero alguno, esa isla desierta que evite la muerte por ahogamiento existencial.