Yo tenía un sueño de España… pero ese sueño murió hace tiempo. El que me acunará esta noche, será mejor. Mi guía en los Años Oscuros. Y vivirá por siempre jamás. Ej12Ms

17 ene 2017

Granja Witiza


Hoy es día de fiesta en la vieja piel de toro reseca, antaño luz, martillo y espada.
Los próceres del lupanar, los sultanes del reino de taifas en el que ha desembocado Chirigota Española, s.a., tienen marcada en su agenda, inconmensurable compendio de vicios, la cita con un circulito en rojo socialdemócrata y una leyenda al pie que les recuerda la importancia de no ausentarse del invento so pena de, en un alarde de inconsciencia imperdonable, irritar a los sultanes del cortijo vasco-catalán, únicos con derecho de pernada en esta orgía de vino, rosas y demás mascaradas lascivas que copan el acta en tales jornadas de servidumbre pública.
Aun siendo blancos como la leche occidental -que todo se andará por la senda de la gran sustitución-, los miembros y miembras y miembres del solsticio de la decencia copan todos los colores de la paleta del demiurgo: los hay rojos, azules, neones, opacos y, en el centro, en frasco pequeño, una doña de simiente moral e intelectual diáfana... translúcida como todo buen salvaje que se precie, aunque haciendo un análisis menos simplista, tampoco los demás ropones del cuadro son esos grandes estadistas que una generación tan bien preparada como la actual merece.
A esta hora, mientras Verón trabaja en su centralita descifrando los mensajes subliminales que utiliza la teleoperadora de la pizzería para engatusarle parmesano a todos los pedidos de la clientela, los camaradas del saqueo institucionalizado estarán debatiendo, con café y pastas, qué partidas deben ser revisadas para que el populacho... o sea, Verón y un servidor... sigan subyugados a su inmenso -y, a la vez, efímero- poder, y todo ha de ser debatido en secreto, con ponencias en secreto, sobres en secreto y un par de adoraciones negras también realizadas bajo el más estricto oscurantismo.
Les va en ello que el paraíso en la tierra que es la sociedad española actual siga sufragando la semana blanca que les aguarda una vez acabe el aquelarre tiñoso en que se juegan a los chinos el futuro del país.
Así, el cuadro abstracto de azures, bermejos y neutros, variopinto como la ensalada de banderas que antaño fueron cortinas, presidido por el Rey sobradamente preparado para el vituperio empoderado de esta democracia real ya que nos ha traído el fin del bipartidismo... hete aquí la nueva era del nauseartidismo..., ajeno a todos y a todo, ahondará en las divisiones que padecemos los españoles según hayamos nacido a la sombra de la familia Pujolonne, el ecosistema asfixiante del cartel de la Junta o en el regazo de las pobrecitas viudas republicanas extremeñas. Dentista gratis en oriente, implante mamario a cargo de lo público en la ciénaga vasca o apéndices sexuales de quita y pon en la panacea de la libre elección del progrerío de calle Génova, bienvenido a la Comunidad del complejo, señorita Cifu al aparato. Usted pida por esa boquita, que el dinero público no es de nadie, y, al mismo tiempo, es de todos. ¿Ancha es Castilla?, ¡pues venga otro céntimo sanitario, contribuyentes!
Ya decía Mariano Rajoy, el Iluminado, que la economía lo es todo.
Su economía... y la de los demás miembros del rebaño de presidentes del saqueo.

Dicen que la historia es cíclica, que se repite como tragedia, primero, y como farsa después, y es bien cierto para todo aquel que, en sus ratos libres, guste de leer cuatro renglones de la infinita Historia de España. Al hacerlo, el curioso lector conocerá en qué quedó el salpicado de reinecitos moriscos que precedió la caída del llorón pajillero de Boabdil, cómo se desmoronó la vieja cueva de Alí Babá y sus ladrones... pero si retrocede un puñado de años más, en los albores de los años oscuros de la pérdida de España, la burla infinita con la que la Providencia se mofa de los modernos hijos de Witiza es digna de servir como ejemplo de la verdad escondida en el verso de marras.
Sin embargo, a los más duros de mollera, esos para los que la magnitud de la tragedia no les permite el transito libre al estado de chirigota perpetua, indicarles el episodio protagonizado por el Supremo y el caso Blanquerna: revisión de la sentencia al alza, al trullo por arramblar en una granja del nacional-socialismo barretinado, grave ofensa a la "ideología catalanista" y su negro misal golpista.
¿No le encuentras la gracia al chiste? Sí, mono... la blitzkrieg de los fascinerosos españoles ante la simpática sonrisa de quienes silban e insultan o desgarran fotografías regias. ¿Sigues sin reír tras comprender el sentido de las contradicciones? ¿Y esos cargos públicos que asaltan la libertades individuales? ¿Y quienes vituperan a victimas y blanquean los crímenes? ¿Sigues ofendiéndote al ver cómo promueven para el nobel de la paz a carniceros estalinistas mientras se ciscan en los valores que nos son comunes al conjunto de los españoles, inocente?
Ya veo. Sigues anclado en la tragedia de España, pero no desesperes: a lo lejos ya se ven ondear los pendones de la bienaventurada farsa, y bajo ellos, caballeros de la infamia vistiendo traje y corbata.