Yo tenía un sueño de España… pero ese sueño murió hace tiempo. El que me acunará esta noche, será mejor. Mi guía en los Años Oscuros. Y vivirá por siempre jamás. Ej12Ms

31 ene 2016

De la falsedad


Cuando tenía trece o catorce años, una noche, de las primeras que puede escapar del Cuartel General para ir a tomar unas cervezas al nido de corrupción juvenil de nuestro pueblucho tarraconense a orillas del Mediterráneo, tuve una experiencia que me marcaría para el resto de la vida.
Un bareto oscuro, tres rubias imponentes, tres chicos -nosotros-, unas pocas palabras para romper el hielo. Ellas del norte de Europa, nosotros autóctonos, y cuando la cosa prometía algún beso de adolescente asustadizo, hace acto de presencia un pelanas... un hideputa con acento rioplatense, pelo lacio y sonrisa resplandeciente... "Viste, chavón"... que nos sisa las conquistas en ciernes dejándonos con la miel en los labios.
Cuando las boludas fueron juntitas al WC, el galán del tango nos confesó con su risa de hiena que él, de argentino, ni el blanco de los ojos: perellonenc, nois, pero me pego el moco que da gusto, tontainas.
Quedé alucinado. 
Probablemente fuera aquel el primer peldaño en mi descenso por la escalera evolutiva del hombre que habita este Mundo Raro; el primero de muchos... pero la cosa aprendida todavía sigue marcada a fuego en mi pellejo: jamás os fiéis de un argentino, Monos. Aunque sea un impostor de la ribera del Delta.
El falsario de la foto que abre la entrada no tiene nada de tarraconense, es tucumano de pura cepa, venido de la pampa a España allá por el 2001, dirección Barcelona, donde al amparo de las faldas de la supermodelo de la Vanity Fair, aka. Ada Hipoteca Colau, ocupa el puesto de primer teniente de alcalde de la Ciudad Condal.
Chupóptero Pisarello, dice la chapa que engalana su solapa, letras arcoiris, conocido en el Ejército de los 12 Monos por protagonizar una trifulca con un edil del PP catalán en el balcón del "hay-untamiento-por-el-cambio" merced un asunto de banderas, temática muy propia del chamizo catalán que nos trajo el genio de la raza superior venida del espacio exterior. Siguiendo la tradición de la lacra humana nacionalista, al profesor universitario.... ¿cuántos profesores universitarios sobran en España?... le molestó que la rojigualda hiciera sombra a la estelada de su corazón, bandera hermana de la revolución cubana de su camarada Fidel, faro en la tiniebla del largo Termidor que nos priva del proceso-constituyente-democrático-real-YA, coño, que hasta Platón se equivocaba, el muy fascista de la meritocracia, como bien nos alecciona el psicoanalista del materialismo histórico.
Con el café de la mañana leía el periódico digital cuando he tropezado con su rostro y su verbo, ahora postulando a favor del cierre de los CIE (Centro de Internamiento de Extranjeros), y fijos mis ojos en los de tamaño hijo de la Bestia, no he podido más que relacionar la avalancha de refugiados, los saltos de altura de las vallas fronterizas, la pancarta de los "Refugiados Welcome" colgando de los consistorios municipales, las agresiones sexuales y verbales, el simpático estribillo del "papeles para todos"... y el perro aquel que, una noche de un verano de los noventa, nos escamoteó el beso de unas chavalas del norte de Europa gracias a su tono meloso y las prédicas románticas de primer curso de moja-bragas.
Falsarios, ¡qué suerte tenéis de que los españoles aún crean en cuentos de hadas!

2 comentarios:

Lin Fernández dijo...

Vaya experiencia erotica las que te saca de la manga.Aunque con la promiscuidad sexual de hoy en dia,ese post tiene mucho viso de realidad,jejeje,un abrazo

Herep dijo...

La realidad ha acabado por superar toda ficción, Agustín.
Un saludo allende los mares.